HAN QUEDADO PERDONADOS TUS PECADOS

                                      HAN QUEDADO PERDONADOS TUS PECADOS

Acercarnos a la Misericordia Divina, al perdón de Dios, depende únicamente de nosotros.
Hay un proceso personal por el cual nos reconocemos pecadores y es entonces cuando vamos a reconciliarnos con el Señor. Una vez confesado el pecado, el Señor a través del sacerdote nos perdona, sentimos entonces la liberación de nuestras culpas y sentimos la Misericordia de Dios derramandose sobre nosotros.
¿Pero...cuánto nos dura la certeza de que Dios obró en nosotros su perdón? 

Seguramente te ha pasado, que después de habernos arrepentido y confesados nuestros pecados, volvemos mentalmente a repasar una y otra vez sobre nuestros pecados, nuestra mente sigue pensando en ellos y haciendonos sentir terriblemente culpables.
En realidad lo que ocurre es que no nos  "Creemos la misericordia del Señor dentro de nosotros".  Es así, no no los creemos. 

Cada vez que pensamos en nuestros errores y pecados pasados, cuando nos oprime remordimientos confesados, estamos dejando de creer que hemos sido perdonados por nuestro Padre Eterno, por el Rey de la misericordia infinita. Yo misma he pasado igual que ustedes por esta situación y no fue hasta ahora que comencé a darme cuenta que estaba ignorando el poder del Padre para perdonarnos y con ello, sólo logramos herir a Jesús nuevamente quién ya a pagado por nuestros pecados.

Hagamos un alto, busquemos un momento para hablar con el Señor desde nuestros corazones, para pedir su perdón y su misericordia, con verdadera confianza comentemos con Él cómo nos sentimos en esta situación, Él escucha nuestras necesidades de guía de la misma forma que escucha nuestras necesidades. El Señor acepta nuestras lágrimas, nuestro perfume y nuestra unción.

Hermanos, nunca me cansaré de decirles que toda situación en nuestras vidas debemos tratarlas, meditarlas con la oración y con la Palabra, porque sin ellas estamos inacabados.

Entonen al Señor un canto nuevo,
pues ha hecho maravillas, 
la salvación provino de su diestra, 
de su brazo de santidad.

El Señor dio a conocer su salvación,
hizo ver a los paganos su justicia,
se acordó de su amor y su fidelidad
en favor de la cas de Israel.
Todos hasta los confines del mundo,
han visto la salvación de nuestro
Dios.

¡Aclamen al Señor, toda la tierra,
estallen a gritos de alegría!
Canten con la citara al Señor,
con la citara  y al son de la salmodia,
al son de la trompeta y del cuerno
aclamen el paso del Rey, el Señor!

¡Rujan el mar y todo lo que contiene,
el mundo y todos los que lo habitan!

Aplaudan los rios y los montes
griten de alegría delante del Señor, 
porque ya viene, porque ya viene
a juzgar la tierra.
Juzgará al mundo con justicia y a
los pueblos según su derecho.